estres que genera tu teléfono

d1ebfbd90fe25f4fa1f2ea4a9b2a0025

 

Los Smartphones son cada día más adoptados por los usuarios, pero ¿somos realmente conscientes de las consecuencias que puede tener abusar de su uso? Casi todos tenemos una persona cercana, cuando no nosotros mismos, que está conectado todo el tiempo con su Smartphone, haciendo un tweet, enviando mensajes, escribiendo por WhatsApp o cualquiera otra acción.
¿Conocemos los problemas que conlleva estar pendientes del móvil?

¿Por qué los teléfonos inteligentes pueden provocar adicción? Por la instantaneidad que ofrecen, paradójicamente pues es lo que debe ofrecernos, pero eso nos hace estar necesitados de revisarlos de forma inmediata cada vez que nos llega un mensaje, alerta, tweet, etc.

La adicción en sí es negativa, pero además esta necesidad de estar pendiente en forma importante nos lleva a tener altos niveles de estrés y últimamente es un problema muy grave que los médicos no saben cómo afrontar.

El estrés provoca muchas enfermedades y cada día más personas están ingresadas por diferentes consecuencias de una vida acelerada, y ya no somos capaces de tomar un descanso siquiera cuando estamos en un momento de “relax”, pues al mínimo sonido que emita el móvil allí estaremos para atenderle.

Un estudio británico así lo ha demostrado, pero los investigadores sin embargo, no relacionaron el estrés con el uso profesional de los Smartphones, sino que se da con el uso personal del mismo, cuando estamos chequeando qué hacen nuestras amistades o revisamos las redes sociales.

“Los Smartphones se utilizan cada vez más para ayudar a las personas a lidiar con diferentes aspectos de su vida”, explicó Richard Balding, autor del informe para la Universidad de Worcester, quien agregó: “pero cuanto más se utiliza, más dependientes nos volvemos de ellos, alimentando el estrés en lugar de aliviarlo”.

“Ahora es bueno estar conectado con ellos, pero también es muy necesario un descanso. De lo contrario, existe el riesgo que el estrés y la tensión se acumulen y puedan tener incluso un impacto negativo en las relaciones que tanto vigilamos”.

Estos datos, al ser presentados en una reunión médica, deben ser considerados como preliminares, pero así será hasta que sean cotejados y publicados en una revista oficial, aunque todos sabíamos esto no sólo por lógica, sino por otros estudios realizados con anterioridad.